miércoles, 1 de abril de 2009

SOCIEDAD ERRÁTICA




No capaces de asumir nuestros errores, los " humanitos superiores" nos fustigamos en busca de dar continuidad a situaciones que no hacen más que prolongar en el tiempo nuestros propios errores.

Eso ineludiblemente conlleva a que la caída, una vez asumido el error, sea de consecuencias más trágicas y duraderas.

No cambiar, supone no evolucionar, todo fracaso es necesario para el aprendizaje pero lo que de verdad es importante es saber evolucionar a tiempo para que el batacazo no sea de dimensiones titánicas o simplemente sea demasiado tarde.

Nos han hecho creer que quedar en evidencia supone uno de los peores fracasos, por ello el único argumento que lanza a las personas a mantener una situación equívoca es el miedo a reconocer los errores ante los demás...
¿Porqué?
Porque nuestras intenciones siempre buscan consciente o inconscientemente conseguir ser superior al resto, ser el gen dominante, ser el líder de la manada... y mostrar debilidad nos deja indefectiblemente en un peldaño inferior.

…Y nos creemos tan distintos de los animales… nuestra complejidad es obvia ante el resto de seres, pero nuestro comportamiento es muchas veces más estúpido.

Todos estos comportamientos se reflejan en muchas índoles de la sociedad…
Pero cuando se manifiestan globalmente surgen las mayores estupideces habidas y por haber: “La era del capitalismo”.
Se necesita un cambio… una evolución… hace meses que lo constata una crisis sin parangón… El sistema está haciendo aguas…y los machos dominantes no ponen fin, sino que argumentan su continuidad con tretas y artilugios decadentes que merman cada vez más su potencialidad...

Cuánto tiempo se necesita para darse cuenta que hay que cambiar, que hay que evolucionar, que hay que perder lastre, que hemos fracasado!!!

Siempre hay nuevas propuestas, siempre hay soluciones, los “humanitos superiores” tienen una característica que les distingue del resto… la imaginación… utilicémosla.

Evolucionar es nuestra finalidad.




2 comentarios:

markuko dijo...

Es difícil, después de una vida tan ociosa, hacerse a la idea de que la 'era postcapitalista' ha llegado.

El horizonte socio-económico no está nada claro, pese a ello nos esperanzamos en que todo, tarde o temprano será igual que el pasado cercano.

Igualmente, retomando el hilo del artículo, parece ser tiempo de nuevos liderazgos: ¿Es la hora del poder femenino? ¿Es el tiempo del multiliderazgo o liderazgo situacional?

Eso no lo sabemos pero de lo que sí podemos percatarnos, es de que las viejas estructuras jerárquicas y viejos patrones de comportamiento se han acabado frente a lo que se viene encima.

Muy buen post!

Salut y desobediencia

diego dlv dijo...

...el líder de la manada...

En la naturaleza, las características intrínsecas de un individuo del mundo animal hacen que se encuentre en un rango social determinado. De las termitas a las hienas, el líder del grupo está reconocido por los demás y tiene una función especial y lo demuestra.

En el caso del hombre, donde los “lideres” de manadas de “líderes” de manadas… de “lideres” de manadas, parecen ser inextirpables de esta pirámide, no hay realmente reconocimiento.
Por ser falsos, erróneos o inexistentes estos lazos, la lucha es continua e interminable.
El poder, el dinero y las relaciones para conseguir más, son los atuendos de estos ilusorios líderes. Sin contar con los que pretenden a serlo, contaminados o hipnotizados.
Dilapidar su vida en estos quehaceres no parece recompensado, y más realizando que con el cúmulo de riquezas, se ha generado una extensión de la miseria y del sufrimiento, hasta a veces, en las propias familias.

¡Hombre que sí! Nuestra imaginación y trabajo nos orientará hacia otras aguas, con menos “tiburones” y más diversidad.

Gracias por tu artículo.

Un cordial saludo